Los bares han tenido un resurgimiento notorio en los últimos años, al haberse gentrificado zonas como las colonias Condesa o Roma. Y aunque no precisamente ha sido gentrificada (porque siempre lo ha estado), la zona centro de la Ciudad de México ha sufrido cambios considerables en la última década (véase el caso del corredor peatonal Madero) y los bares han buscado cabida entre las calles del primer cuadro, siendo objeto de transformación o desaparición de muchas tradicionales cantinas y pulquerías del siglo pasado. Sin embargo, otros lugares han encontrado espacios nuevos en las terrazas, mismas que igual están de moda, y hay una en específico que no tiene símil en la visual que nos ofrece: Terraza Catedral.
Ubicada en el punto más alto del hostal Mundo Joven, en la calle a espaldas de la Catedral, tiene una vista privilegiada del primer cuadro de la ciudad y en especifico, como lo dice su nombre, de la majestuosa Catedral Metropolitana. También se puede observar desde este punto la invicta Torre latino, la imponente cúpula del Exconvento de Santa Teresa La Antigua y al norte, del lado donde se ubica el DJ, el edificio iluminado del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, antes Secretaria de Relaciones Exteriores. En lo personal siempre he sido fan de las terrazas y lugares altos - irónico si tomamos en cuenta mi miedo a las alturas - con vistas panorámicas.
Y pasando a lo que realmente les interesa... Tuve la oportunidad de visitarlo por mi cumpleaños y quedé satisfecho con la experiencia, si bien hubo un detalle que de haber escalado me hubiera estropeado la noche. Si van a festejar algo en especial, es bueno que reserven, se puede hacer máximo para 20 personas. El inconveniente es que te hacen válida la promoción en que tus acompañantes no pagan cover solo de 18:00 a 20:00, cuando a esa hora esta casi vacío el lugar y hay muy poco ambiente. Claro que si lo que quieres es charlar, está perfecto.
Aquellos seres nocturnos adictos a la fiesta y a beber cantidades industriales de alcohol, comienzan a manifestarse alrededor de las 20:00 en fines de semana, por lo que la música que a tempranas horas oscilaba los 80 bpm con fluidos chill out y dance, empieza a acelerarse y surgen torrentes sonoros de 150 bpm para ofrecernos unas buenas mezclas de house, deep house, techno y trance, entre otros subgéneros electrónicos.
Y es precisamente esta otra de las virtudes del lugar: su música. Si quieres escuchar y bailar banda o reggaetón, olvídalo, no es el lugar indicado. Su esencia radica en la electrónica, tanto que semana con semana hay DJ's invitados, algunos de ellos ya reconocidos en el panorama nacional. Ocasionalmente hay presentaciones en vivo y de otros géneros (algunos latinos como salsa), pero nada muy ajeno del contexto del que hablamos, sobre todo en fines de semana. Aunado a esto, hay un plus que le da más sabor al ambiente: la presencia de extranjeros en los pasillos y mesas aledañas, pues como ya mencioné, es la terraza del hostal Mundo Joven. Así que si tienes dominio de otros idiomas o simplemente eres desinhibido, podrás charlar con gente de todo el mundo y hacer nuevas amistades.
En cuanto a la carta, cabe destacar que el fuerte es la coctelería. Claro, no es la mejor de la ciudad, pero se defienden sus tragos. Yo pedí un Cosmopolitan que para ser francos estaba bueno, y contrariamente un Old-Fashioned en el que me quedaron a deber la angostura y con exceso de azúcar. Si llevas menos presupuesto o te gusta llevar la fiesta en paz, puedes optar por cervezas (Grupo Modelo) o de barril, a precios accesibles tomando en cuenta la zona y tipo de lugar que es. Las botanas y platillos son propios de un local de su especie, sobresaliendo las tapas.
En cuanto a la decoración del lugar, cumple con su objetivo sin ser lo más vistosa posible, aunque resaltan sus luminarias colgantes. Eso sí, una que otra mesa para grupos grandes es de madera reciclada (bien ahí), pero al tener un acabado rústico hace difícil a ratos el poner tu bebida sin miedo a que se derrame. Lo realmente interesante es deambular entre la gente o estar en la barra.
Por último, les sugiero tener a la mano los detalles de su reservación (o conversación si es que la hicieron vía Facebook), pues el incidente que se presentó fue que la hostess no me quería hacer válida mi promoción y me cobró cover junto a mis invitados. Lo peor de todo fue su actitud petulante y déspota, como si ella nos tuviera que hacer un favor: no señores, no es un favor el que nos hacen, es su trabajo y les pagan por eso. Exijan siempre que el personal que les brinde un servicio se los dé de manera respetuosa y adecuada, así como ustedes se dirigirán a ellos. Afortunadamente, el gerente (y al parecer, también socio) se encontraba en el lugar, le expliqué la situación y me solucionó efectiva y amablemente el problema; eso sí, con una cara de pedo atorado por parte de la hostess al regresarme el dinero.
Dicho todo esto, el veredicto es con fallo a favor de Terraza Catedral. Verdaderamente lo recomiendo si están buscando pasar una noche con buenos tragos y ambiente chic. Y recalco, la hermosa vista del skyline de la gigantesca ciudad les encantará, nunca se les va a olvidar.
* Rango de precios por persona (sin propina): $400 - $600
* Tarjetas de crédito: Todas
*Estacionamiento: No, aunque si aún hay lugar lo puedes dejar en la misma calle. Ya sabes, pagar al franelero ($80 aprox.) y rezar porque no le pase nada a tu auto. Este "servicio" es totalmente ajeno al establecimiento
*WiFi: Sí
*Reservar: Recomendable para grupos grandes, mas no indispensable, sin costo
Puntaje general: 8.2
* Ubicación: 10
* Instalaciones: 8
* Costo: 8
* Ambiente: 9
* Acceso a personas con discapacidad: 7
* Presentaciones de los platillos: 7
* Sabor de los platillos: 7
* Menú: 8
* Servicio: 8
* Higiene: 10
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