Famosos musicales #1: Love to love you baby / Donna Summer

¿Alguna vez te quedaste en mente con una "tonadita"? ¿Una melodia que cantas o “tarareas” sin que la sepas completa, pero te acompaña un buen tiempo y no se te sale de la cabeza? A veces ni siquiera nos gusta, pero es tan pegadiza que la recordamos en el transporte, mientras nos bañamos o antes de ir a dormir. Otras ocasiones hacemos lo posible por buscar el nombre de esta pieza: preguntamos a nuestros conocidos – o a los que estaban en la fiesta donde la escuchamos - si la conocen, si aún la recuerdan, si nos pueden dar información de la misma… O en el momento recurrimos al ya infalible Shazam, esperando que el ruido no estropeé nuestros planes de agregarla a nuestra biblioteca musical.

Esta sección será dedicada a aquellas canciones o piezas musicales en general que sean muy famosas; en pocas palabras, las que no sabemos cómo se llaman o de quien son, pero que todo mundo conoce o ha escuchado, aunque sea una vez en la vida. Obviamente será producto de mis humildes gustos y saberes (espero no vengan buscando alguna de Reggaetón, Tribal o Banda, porque perderán el tiempo y les regalaré, con todo respeto, un boleto con destino a la chingada), que van desde mi pasión, la música clásica, hasta una que otra canción de música popular mexicana, pasando por Rock, Jazz, Bossa Nova, Soul, Pop, R&B y demás géneros de mi agrado. Dicho esto, comenzaremos esta serie de Famosos musicales con un orgasmo - literal – auditivo: Love to love you, baby de la reina de la música disco, Donna Summer.

La historia de ésta canción es singular, pues nació bajo un aire de expectativa, de poca fe; sin embargo, pasó a convertirse en el primer gran éxito de la cantante afroamericana, tras un modesto reconocimiento en Europa. Detrás de la producción y música, se encuentra el legendario y genial Giorgio Moroder (ambos en la foto de arriba), quien incitó a Donna a cantar la canción. En las sesiones de grabación, es bien sabido que ella pidió intimidad para poder fingir los gemidos o falsos orgasmos, ya que se sentía cohibida y sólo así daría resultado. Posteriormente, cuando se volvió fanática religiosa, renegó de este hito de la música disco, al grado de demandar a su antigua discográfica por cuestiones de imagen personal. En los 90’s terminó por reconciliarse con su pasado y lanzar una nueva versión de la misma, que careció del impacto y popularidad de la primera.

La versión original dura 16:50 y la versión del sencillo para la radio 3:24, que es la que les dejo para deleite de sus oídos. Teniendo una letra erótica y una voz sensual, vale la pena escucharla con detenimiento, porque a pesar de tener una base musical muy simple, todo el conjunto es la clave de la elocuencia en ésta canción.